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Hola amigos de @steemit en español, la práctica regular de un deporte aporta diversos beneficios a la vida de una persona, como la sociabilidad, el aprendizaje del trabajo en equipo, la mejora del estado de ánimo, el estado de ánimo y la calidad del sueño, la pérdida de peso y la prevención contra el desarrollo de enfermedades graves como diabetes, obesidad, problemas cardíacos, hipertensión y osteoporosis.

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Sin embargo, debido a varias razones, como errores técnicos, frecuencia e intensidad excesivas de ejercicio o accidentes, los profesionales de negocios también pueden sufrir lesiones desagradables y no deseadas en el deporte.
Y si no existe un método que garantice que la persona esté libre de lesiones deportivas como dislocaciones, esguinces, roturas e incluso fracturas, la adopción de algunas medidas preventivas puede ayudar a reducir este riesgo.

La noche antes del entrenamiento o de iniciar una actividad deportiva, asegúrate de dormir bien y de despertarte renovado y dispuesto a practicar deporte. La falta de sueño puede eliminar la concentración y puede perjudicar la concentración y te puede hacer menos consciente cuando se trata de protegerte de encuentros y accidentes, y menos cuidadoso con la técnica.

Antes de iniciar la actividad deportiva debes hacer calentamiento. Esta es una de las mejores tácticas para evitar lesiones deportivas, ya que el calor causado por el calentamiento deja el tejido conectivo del cuerpo más flexible, lo que mejora la forma en que se realizan los movimientos.

Sin embargo, durante el calentamiento no debe hacer ejercicios extensos, porque cansarse demasiado implica grandes riesgos de hacerse daño, elija actividades ligeras y de bajo impacto como caminar o andar en bicicleta o hacer actividades similares al deporte que está a punto de practicar, pero con una intensidad más ligera.

No se lo pierda aún para estirar su cuerpo, estirarlo sin exceder su punto de resistencia y estirar cada parte durante 10-12 segundos.

Del mismo modo, cuando termine de entrenar o salir, realice los mismos ejercicios de bajo impacto para enfriar el cuerpo.

Tener una buena coordinación es otro punto que ayuda a evitar lesiones deportivas, teniendo en cuenta que su falta es otro factor de riesgo para la aparición de tales problemas.

Un juego importante puede poner al atleta nervioso y tenso, lo que hace que el cuerpo esté rígido. Sin embargo, es esencial que intente mantenerse relajado y eliminar la rigidez, ya que también podría ser responsable del mayor riesgo de lesiones en el deporte.

Cuando la tensión comienza en la mente, una buena táctica para relajarse es disipar los pensamientos que causan el nerviosismo de la mente y concentrarse en las cosas buenas que generan tranquilidad. Además, respirar profundamente, masajear y acostarse en el piso puede ayudarlo a relajarse.

No dejes que la adrenalina del juego te haga olvidar beber agua periódicamente durante el juego o el entrenamiento, ya que es la hidratación la que ayuda a prevenir calambres y lesiones musculares. Y no espere hasta sentir la sed de reponer el agua en su cuerpo, porque cuando aparece esta señal, la pista es que el cuerpo ya está deshidratado.
Así que siempre tenga una botella cerca para no olvidarse de beber agua y tomar breves descansos para tragar el líquido.

Cuando llegue al lugar donde se practicará el deporte, tenga cuidado de ver si la estructura del entorno no es insegura. Si encuentra que las condiciones no son apropiadas, hable con los organizadores o su entrenador y resuelva el problema antes del inicio del juego o entrenamiento. De esta forma evitará lesiones deportivas para usted, sus compañeros de equipo y sus oponentes.

Protégete lo más posible mientras practicas tu deporte. Si tiene rodilleras, cascos, coderas, cerraduras, espinilleras, protectores nasales y bucales y otros dispositivos de protección a su disposición, úselos. También pueden molestarte un poco, pero reducirán las posibilidades de que te hagas daño.


Si siente dolor o se da cuenta de que se lastimó una parte del cuerpo antes del juego, no juegue el sacrificio ya que esto podría empeorar su problema. Hable con el entrenador y su médico o la persona a cargo de su equipo y trate la complicación. Luego, cuando estés curado y recuperado, puedes volver activo y dar el 100% de tu rendimiento deportivo.

La misma regla se aplica al entrenamiento. La aparición de dolor e incomodidad puede ser un síntoma que le está pidiendo demasiado a su cuerpo. Cuando esto sucede, reduzca la intensidad y la duración, realice una evaluación médica y reduzca las posibilidades de sufrir agotamiento.

Sin embargo, tenga sabiduría al tratar con su cuerpo. Incluso si no eres un atleta profesional, lo necesitas para las actividades diarias. No exceda los límites, respete las señales que presenta y cuide su instrumento para que pueda disfrutarlos de manera eficiente.

Si practica un deporte que funciona en un área específica del cuerpo, también invierta en entrenamientos que usen otras regiones cuando esté de vacaciones o con tiempo libre, para evitar el riesgo de lesiones deportivas debido al uso excesivo de una región en particular.

Espero le sea útil esta publicación. Gracias por visitar mi blog. Saludos @alicargofer.

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