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<center>***III***</center>
<center>***Un mártir… o un vulgar kamikaze***</center>
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<div class="text-justify">En la caída libre todo pasaba muy despacio; Benjamín miraba a la bastedad del horizonte despejad mientras calculaba el momento preciso para desenvolver lo que sería un suceso de gran envergadura.
El pulgar reposaba sobre el detonador impaciente, deseando terminar con todo sin tanto capricho; las ráfagas de aire que atravesaba no lo hacían perder el control, por el contrario, le generaban cierto consuelo al saber que moriría experimentando en parte lo que desde chico considero su elemento. </div>
<center>[fuente](https://scontent-mia3-1.xx.fbcdn.net/v/l/t31.0-8/25182061_1960106044018584_2839164765377621714_o.jpg?oh=fc57cd0641cecb258252d405040fdf4a&oe=5ABD993C)</center>
<div class="text-justify">Todos vivimos el tiempo de manera diferente; en estos últimos instantes Benjamín no pudo sacarse de la cabeza si el plan iba a funcionar, las repercusiones a futuro, o si valdría la pena tanto desastre, lo cierto es que repaso de manera fugaz todo lo que hizo ese día desde que puso un pie en su viejo piso la madrugada anterior…
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Llegó a la vieja casa; y en seguida empezó a descargar del auto todo lo relacionado a
***“El vuelo”*** mientras iba chequeando el inventario. Se encontraba agotado después de pasar un día y dos noches planeando algo que desecho a último momento, y decidió tomar un derivado de anfetaminas que le habían recetado desde adolescente para mantenerse activo, que por cuestiones ajenas había dejado de tomar,pero que siempre cargaba encima.
<div class="text-justify">Observó un rato los viejos portarretratos con fotos de una niñez casi olvidada y épocas que no volverían, triste escena, casi tan triste como no ver a las personas de las fotos hace tanto tiempo, y que descubran por un tercero o un medio amarillista que decidiste morir. Benjamín no hizo más esfuerzo en revisar su vieja casa ya que le vendrían más pensamientos de la misma índole.
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Se dirigió a un cuarto que utilizaban como depósito en aquella época, con la intención de encontrar un artefacto fundamental para realizar su labor; buscó sin mucho apuro y se topó de inmediato con la vieja ala delta con la que solía descender junto a su padre desde ciertos picos cuando pertenecían al extinto ***“Club De Aeronáutica Y Parapente”***. Los recuerdos idílicos que se habían pisado tras todos esos años de lucha se reprodujeron como diapositivas en la mente de Benjamín inconscientemente.
<center>[fuente](http://lh6.ggpht.com/_GuCIlQq5ric/SiwnOoSX6GI/AAAAAAAACGM/aynqC2gFt-M/s800/P6071988.JPG)</center>
<div class="text-justify">El surcar los cielos junto a Belisario era algo que atesoró tanto de chico, no todos los niños podían presumir de un padre que te llevara los fines de semana a la costa a planear en ala delta; cosas que no volverían, Belisario estaba en otro plano y ya no había amigos a quien presumir, todo se lo llevo el mismo vendaval.
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Pasaron un par de horas y benjamín ya tenía todo listo; el vehículo, las cargas, el punto estratégico, y lo más importante, la determinación. Sucumbió ante el cansancio y no dudo en dormir un rato, al menos hasta que amaneciera y tuviera la suficiente energía como para llevar a cabo toda la faena.
Rápidamente entre dos pestañeos cayo dormido en un sofá lleno de polvo con la misma muda de hace varios días, despertó unas 5 horas después con el mismo ánimo con el que se recostó ese lapso de tiempo; ya eran las ***“catorce horas”*** y estaba justo a tiempo para llegar a la atalaya en la que tenía designado el movimiento.
Salió del letargo que le provoco el volver a su vieja casa y se fue empacando en el auto todo lo que había inventariado anteriormente; piso el acelerador y se dirigió al centro de la ciudad, las carreteras de la ciudad presentaban muy poco tráfico por la falta de repuestos e insumos para los vehículos; por lo que estaban vigiladas constantemente por la guardia nacional. Benjamín tomó los caminos verdes que conocía de memoria hacia su destino; llegó al edificio ***“Gran León”*** sede de un hotel de época. A las puertas se encontraba Javier Vieira, propietario y gerente del hotel desde hace más de 20 años; Benjamín ya había hablado con él por teléfono para pedirle un favor y prometió visitarlo. Vieira era un viejo amigo del padre de Benjamín desde que se conocieron en el ***“Club”*** en su juventud. Había visto crecer a Benjamín desde que era un chico y se sorprendió al verlo después de tanto tiempo. </div>
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> <center>*Epale chico, tiempo sin verte!!!*</center>
<center>***Exclamo Javier.***</center>
> <center>*Si vale, he estado un poco ocupado últimamente Don Javier*</center>
<center>***Respondió Benjamín.***</center>
> <center>*Últimamente... mmm ¿Qué te trae por aquí hijo?, tenías tiempo sin acercarte, desde lo de tu padre...*</center>
<center>***Pregunto el señor de blanca tez.***</center>
> <center>*Vengo a cerrar un ciclo y a abrir otro jefe... ¿Me prestaría por una última vez las llaves de la azotea?, para unas fotos como cuando estaba más joven; las guacamayas salen como a esta hora, prometo devolvérselas en un rato.*</center>
<center>***Dijo Benjamín entre risas y recuerdos del viejo amigo de su padre.***</center>
> <center>*Claro hijo, recuerda que esto todavía es como tu casa. Pasa adelante!*</center>
<center>***Respondió Don Vieira, sin hacer tantas preguntas acerca del tema.***</center>
Le dio un apretón de mano como acostumbraba a su padre y entrego a Benjamín un manojo de llaves independientes a las demás con un llavero marcado con una ***“P”*** y una ***“H”***, indicando ***“PentHouse”*** aunque solo fuera una azotea.
Benjamín tomo las llaves e hizo un gesto como diciendo ***“en un rato nos vemos”*** ; caminó hacia el ascensor y subió hasta el piso 31, tomo las llaves que les dio Don Vieira y abrió la reja que llevaba a la azotea después de intentar un par de veces con el manojo que tenía.
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[fuente](http://3.bp.blogspot.com/-MhJuUNTVFvA/TW3XDDHHIHI/AAAAAAAAC1U/YYxsz8dYUYY/s1600/00003718-original.jpg)</center>
Entró por fin al punto estratégico y empezó a descargar por última vez el contenido de su bolso; armó el planeador y una vez completo lo ancló a un poste para que no saliera volando. Se colocó un chaleco con las cargas de ***“C4”*** conectadas todas a un mismo detonador asegurándose de que ninguna quedara suelta.
Vió un barril de metal cercano y arrojo dentro todos sus objetos personales; una billetera, un pasaporte vencido, las llaves del auto y un escapulario con las fotografías de sus difuntos padres. Tomo la bencina que llevaba en su bolso y vació sobre todas sus cosas el contenido de la lata; en ese momento se encendió la primera llama de esa tarde. ya no existía Benjamín
Esperó con una rara paciencia a que todo se volviera ceniza o al menos que sus pertenencias quedaran cubiertas de hollín...
El evento estaba por comenzar; ***"El Halcón"*** divisaba desde lejos con unos binoculares como los invitados empezaban a llegar y se congregaban para una foto grupal que englobaba la mayoría de la corrupción de un país reconociendo claramente a cada uno de ellos; el presidente y su gabinete, familiares beneficiados de la ruina y algunos caudillos; se juntaban todos en un mismo lugar.
El cielo abierto de la plaza nacional, iluminada por miles de reflectores fue el mejor escenario que pudo haber tenido Benjamín a su disposición, trazó una vez más su ruta y desanclo el planeador del poste, se lo calzo y acercándose a la cornisa espero el momento preciso donde la bazofia se alineara.
<center> [fuente](http://www.elarteyeldivan.com/wp-content/uploads/brodsky12.jpg)</center>
El mandatario se alzó al podio pronunciando el mismo discurso de siempre, hablando de extremistas, politicas economicas que lejos de ser soluciones para la crisis eran solo fachadas y gente que lo desacreditaba internacionalmente para sacarlo del ejercicio gubernamental que tanto presumía que era perfecto; cosas rutinarias de las que todos estaban acostumbrados ya, ver en cadena nacional a ese desgraciado, ver los ojos de su ídolo en las paredes, ver las personas esqueléticas en la calle, ver la miseria que se creó a causa de las malas decisiones de un pueblo cegado por las mentiras de alguien hábil con las palabras.
> <center>*No se diga más!*</center>
<center>***Pensó “El halcón” en ese instante y se lanzó al abismo.***</center>
Todo le era familiar, tan cómodo en el aire como el ave de su apodo. Planeó por encima de los edificios aledaños y por la avenida principal, asegurándose de estar lo suficientemente alto para no ser avistado por algún guardia. Logro posicionarse sobre la plaza nacional, a una altura considerable como para no fallar en el cálculo.
Soltó el arnés que lo sostenía del ala y empezó a caer directo hacia su cometido .
La caída libre no tapo sus tímpanos, por lo que pudo escuchar nítidamente los aplausos ante las últimas palabras del cerdo postrado en la tarima
> <center>*Tibi gratias ago pro adventu!*</center>
<center>***Grito Benjamín Soublette con sus ultimo aliento ...***</center>
> <center>*La historia se repite una vez mas... en algún momento un loco iba a matar a esa pandilla de ladrones de cuello blanco...*</center>
<center>***Dijeron los testigos mas viejos del acto...***</center>
<center> [fuente](https://c.pxhere.com/photos/a6/58/fireworks_epcot_disney_fire_pyrotechnic_red_orange_light-861766.jpg!d)</center>
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