Tienes toda la razón, de hecho tu comentario completa muy bien la idea.  Hay una tendencia hacia lo "positivo" que tiene su punto de origen allá por los años 50 (me gustaría escribir acerca de eso, es muy interesante), según esta concepción “positiva”, sentirse mal, está mal, y hay que buscar todas las maneras posibles por estar bien, esto es lo que dio origen a la actual mercadotecnia. Ese afán por: estar bien, es más bien una especie de lavado de cerebro.  Realmente nos han engañado, pues las emociones son parte de nuestra vida.  Lo que puede ser cuestionable es la manera como reaccionamos ante las emociones que sentimos, y en todo caso, tenemos la libertad de reaccionar como queramos. Pero, he ahí el detalle, ¿reaccionamos realmente como queremos hacerlo?  Lo que no estoy de acuerdo es que estemos determinados, que no podamos responder de una manera diferente a lo que nuestro entorno nos obliga.  Si me tratan mal, tener que responder al mismo nivel, si me gritan, gritar, si me golpean, golpear, si me humillan, humillar?  En ese sentido se pasa a ser esclavo de las circunstancias, de nuestras reacciones.
Sentirse mal, está bien,  pero no tiene porque condicionar nuestras respuestas, puede ser que sentirse mal, sea lo más normal en este mundo que nos rodea, eso no tiene discusión. 
Gracias por leer, y por dejar tan valioso comentario que da pie para continuar en el tema y ampliarlo.
Un abrazo.